Diez cosas que dejarás de hacer cuando seas mamá

Todos estamos de acuerdo en que tener un hijo es una experiencia única, y que no lo cambiaríamos por nada del mundo. Pero está claro que cuando la familia crece, hay cosas que no podrás hacer (o te costará un esfuerzo increíble llevarlo a cabo) con un pequeño retoño corriendo por la casa y gritando ¡mamá! y ¡papá! constantemente. Aquí tienes algunas de ellas.


No podrás echarte la siesta


- Hablar horas y horas por teléfono. Empecemos por lo sencillo. Si antes podías tirarte horas y horas enganchada al móvil… ¡Olvídate! Tu hijo te quiere sólo para ti. No está dispuesto a compartirte. Los pequeños tienen numerosas estrategias que desarrollan con una eficacia increíble. Desde arrancar literalmente el teléfono de tus manos para entregárselo a tu pareja, o en el peor de los casos, arrojarlo al suelo, hasta ponerse a cantar y gritar bien fuerte para que sólo sea audible su chillona vocecita. 

- Echarse la siesta. ¿Siesta? ¿Qué es eso? Se acabaron esas memorables ‘cabezaditas’ de sobremesa, que en ocasiones se alargaban hasta bien entrada la tarde. Mientras nuestro angelito carga las pilas, tú aprovechas para recoger la casa, limpiar, leer, pintarte las uñas… Es una de las cosas que, sin duda, dejarás de hacer con la llegada de tu pequeño.



- Vaguear. Seguro que a estas alturas de la maternidad te has suscrito a varios blogs, newsletter de revistas especializadas sobre maternidad… todo para obtener ideas de qué hacer y cómo entretener a nuestros pequeños.

- Filmanía. Si eres un adicto a los fines de semana de cine… Olvídate. A partir de ahora, lo más parecido a una cinta ‘de culto’ será AladdinTadeo Jones o El gato con botas.


Tadeo Jones encanta a los niños

- Cocina creativa. He de reconocerlo. La cocina y yo no nos llevamos bien, pero si lo tuyo es disfrutar con la elaboración de platos sofisticados, o pides la colaboración de tu pareja para que entretenga a tu hijo durante una hora larga, o te conformas con comer purés y cenar a deshoras..

- Antes muerta que sencilla. ¿Estás segura? Dirígete al baño y mírate al espejo. Seguro que en lugar de tu melena al viento desde hace tiempo optaste por la coleta o el moño; ya no te maquillas y como mucho, empleas rímel transparente, algo discretito e incoloro para besuquear a tu pequeño sin problemas.

- Bolsos discretos. Se acabó eso de portar mini-bolsos cuquis. En su lugar, cada vez que sales de casa, optas por coger una mochila con capacidad para albergar a cuatro niños si fuera necesario. Un botiquín de primeros auxilios, mudas, pañales (yo ya no, jeje), agua, merienda, tentempié, juguetes…

Adiós al baño con espuma

- Baños con espuma. Adiós, bye-bye. Ahora optas por la ducha, y rapidita. En cuanto tardas más de la cuenta, ahí tienes a tu hijo, aporreando la puerta del baño o metiendo su dedito por el hueco de la mampara.

- Gimnasio. Bastante tienes con levantar cada dos por tres a tu pequeño, pelearte con él/ ella para vestirle o desvestirle, subirlo y bajarlo del coche, empujar la sillita… como para plantearte lo del enfundarte el chándal y sudar la camiseta. ¡Si ya lo haces!

- La décima la escribes tú. ¿Qué cosas has dejado de hacer desde que eres mamá?

7 comentarios:

  1. 10.Ir de tiendas. Misión imposible. He llegado a ir por H&M con la teta fuera para que me diera tregua unos minutos y poder mirar ropa tranquila. Lo de entrar al probador, ya ni hablamos.

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  2. Jajaja. Ay Lucía, menuda estampa. Desde luego, shopping y niños es incompatible. Incluso con ayuda es misión imposible.

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  3. toda la razón, nosotras en nuestro blog tenemos varios post dedicados a "con lo que yo era..." hablando precisamente de esto jaja.

    Que le vamos a hacer... esto viene en el cargo!!

    María

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    1. ¡Gracias María! En cualquier caso, son pequeñas cosas que dejamos de hacer de manera temporal y que, sin duda, un abrazo o sonrisa de nuestro hijo compensa todas esas pequeñas renuncias. ¡Os espero en el próximo post! Besos

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  4. Salir a bailar. Se acabaron las salidas nocturnas, pues aunque por la mañana nos prometamos que será el día en que nos vayamos de antro, terminamos más que agotados y somos los primeros en caer rendidos a los brazos de morfeo! excelente blog, me ha gustado mucho! ya lo sigo :)

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  5. Hola Mami Wendo!
    Desde luego, salir a bailar se vuelve complicado, a no ser que aceptemos los juegos infantiles como tal. ¡Muchas gracias por tu comentario! Un abrazo y nos seguimos viendo/ leyendo por aquí :)

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  6. comer tranquilamente, saborear la comida y masticarla bien. Ahora rapidito los bocados, por que el bebe ya quiere la teta :)

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